la suerte suprema

la suerte suprema
Pepe Bienvenida / La suerte suprema

lunes, 21 de octubre de 2013

MÉXICO: CORNADAS ESCALOFRIANTES / Por Bardo de la taurina



CORNADAS ESCALOFRIANTES

Bardo de la taurina
Juan Luis Silis, quién hoy es un mártir producto de las circunstancias, hace un año era la luz nueva que le dio brillo a esa feria que es la de Pachuca y que al igual de como sucede con otras que dan las empresas establecidas y las advenedizas, da trompicones comenzando por el hecho de que a la hora de pegar nombres a los carteles, el engrudo se les hace bolas en el mejor de los casos y esto lo digo pa’ no pedirles se hagan una prueba de ADN taurino a quienes forman las marquesinas, en la particular la de Hidalgo donde lo justo, lo coherente, lo procedente, lo lógico, lo natural hubiese sido premiar al triunfador de la pasada feria que lo fue Juan Luis Silis, con su inclusión en el cartel estelar, el inaugural, en el que hubiera estado al lado de una primerísima figura, eso sería premiar, reconocer e impulsar a un torero, que además es un baluarte del toreo a la mexicana y aquí aclaro, esto no lo estoy diciendo en adherencia a los arribistas y oportunistas del amarillismo que hoy brota como pus, porque a todos los que favorecen esta columna y otros aparadores del tal Bardo, les consta que a Silis desde en’denantes se le dedica harta tinta como una tarea de reconocimiento e impulso y pa’ seguir ahondando sobre el tema pregunto ¿Es premiar a un triunfador, el haberlo echado con los destroyers cinqueños de una ganadería dura como palo de fierro que lo es la de José Julián Llaguno? que está pa’ que se la traguen los que están en la guerra y no el que ya se ganó con arte un mejor trato o los que nada tienen que hacer, como ese cartucho que sacaron del tiradero de saldos sevillanos pa’ quitarle un puesto a un joven tricolor hambriento de oportunidades que los hay, ¿Eso se merecía, el torero triunfador?

Y como ahora el morbo o la moda por un rato vendrá tintada de desaciertos permítame sugerirle a usted solo dar por bueno lo que provenga de los médicos adscritos al caso Silis o de los selectísimos informadores veraces a los cuales le recomiendo leerlos a todos, que al cambio son rete bien poquitos y a lo demás por salud mental jáleles la cadena pa’ que así las aguas negras no enturbien algo de lo poco puro y verdadero que aún conserva la fiesta como lo son las cornadas y por ello la revaloran y más aún con lo acontecido el sábado en Cinco Villas, donde un novillero salió con un pulmón perforado y lo ya largado de Pachuca, deberán de servir pa’ que los arlequines que se han infiltrado en las filas de la torería y los apañadores de alternativas recapaciten y mediten sobre su ‘pasatiempo’ porque en una de esas, un toro les anda arremangando un chingadazo de esos que ni Dios Padre se los quita y del que se van arrepentir toda su vida, porque ojo, los toros dan fama, mujeres, dinero, vino, flamenquería pero también dan cornadas y matan y no se vayan con la finta de que de estos ‘tabacos’ se salvan con oraciones, vibras y buenos deseos, ¡no, no, no! pecadores de la golfería y la usurpación no se confundan, ni sigan bajo el disfraz esporádico de un terno de luces y menos se vayan a escudar en el hecho de que porque Juan Luis Silis y Ángel Espinoza ‘Platerito’ la vayan a librar, ustedes también, este par de toreros van a salir adelante y volverán a pisar la arena precisamente porque son toreros de cuerpo y alma dedicados a su profesión, preparados físicamente, labrados en el ejercicio extremo que alientan los amaneceres y rematan en el yunque al vivo rayo del sol que les calcina sus pieles curtidas pa’ la faena extenuante y es esa condición física la que les está permitiendo a los galenos maniobrar científicamente en la heridas de estos hombres que resisten todo y ¿saben por qué lo resisten? por que ya han aguantado las cornadas de la indiferencia, la ingratitud, las injusticias y los desaires, esas que solo los toreros con carácter aguantan sin doblegarse.

Y ojala ahora que reaparezcan estos valerosos, no les vaya a pasar ni por el pensamiento a las catervas en ese su afán de protagonismo, entregarles a los corneados una plaquita por su ‘Valor Indomable’ porque un torero, lo menos que debe de tener es valor y entrega y me voy con la convicción de que lo sucedido este fin de semana fue dramático ¡Si! pero normal en una fiesta que es brava cuando los bureles salen con edad, kilos y en puntas.

No hay comentarios:

Publicar un comentario